La terapia infantil tiene una gran diferencia con la terapia con adultos ya que en ella se utiliza el juego como elemento principal.

La primera sesión siempre la realizamos con los padres para que nos conozcan y nos puedan contar la problemática y el motivo de consulta, para ya luego a partir de la segunda sesión conocernos con el paciente.

El niño encuentra a través del juego, dibujos y escenificaciones, una manera simbólica de expresión que facilita la comunicación de sus problemas, miedos, emociones, preocupaciones, sensaciones, etc.

El juego tiene una importancia tan vital en el niño que incluso existen modelos de intervención terapéutica enfocados esencialmente en el juego. De esta forma es posible crear un contexto seguro, en el que los niños puedan expresarse, aprender e interactuar, explorando y buscando soluciones a sus miedos.